martes, 28 de febrero de 2017

Inicios de Sócrates



Sócrates nació en la Antigua Atenas, 470 a.C

Su inconformismo lo impulsó a oponerse a la ignorancia popular y al conocimiento de los que se decían sabios, aunque él mismo no se consideraba un sabio

 Querefonte, amigo de Sócrates,le preguntó al oráculo de Delfos si había alguien más sabio que Sócrates, y la Pitonisa le contestó que no había ningún griego más sabio que él.

Sócrates dudó del oráculo, y comenzó a buscar alguien más sabio que él entre los personajes más renombrados de su época, pero se dio cuenta de que en realidad creían saber más de lo que realmente sabían.

Esto lo llevó a tratar de hacer pensar a la gente y hacerles ver el conocimiento real que tenían sobre las cosas. Asumiendo una postura de ignorancia, interrogaba a la gente para luego poner en evidencia la incongruencia de sus afirmaciones; a esto se le denominó «ironía socrática», la cual queda expresada con su célebre frase «Yo sólo sé que no sé nada»

Murió en Atenas en 399 a.C.

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lunes, 27 de febrero de 2017

La Ética de Sócrates


    1. Sócrates (470-401 a.C). Su vida fue filosofar y enseñar. Su preocupación era la conducta degradada de sus conciudadanos; en consecuencia, enfocó su curiosidad intelectual en el ser humano y en su capacidad de conocer la verdad.Contemporáneo de los sofistas, muchos creyeron que era un sofista más, pero era exactamente lo contrario. Nunca intervino en la política. No pronunciaba discursos. No escribió nada. Según él, nunca fue maestro de nadie. Simplemente se dedicaba a conversar con quien quería conversar con él; creía que la sabiduría se adquiere en el intercambio vivo de la conversación, haciéndose preguntas y buscando juntos respuestas. Así y sólo así enseñó a pensar, a buscar la verdad y a saber que es posible alcanzarla. A diferencia de los sofistas, no cobraba por sus enseñanzas.
      De esta manera luchaba abiertamente contra el relativismo sofista pues sostenía la posibilidad de acceder al conocimiento de verdades eternas e inmutables mediante la mayéutica entendida como el arte de parir o dar a luz el conocimiento. La mayéutica era el diálogo entre el discípulo y el maestro con el fin de solucionar planteamientos problemáticos.

      El primer paso era reconocer la propia ignorancia. Repetía en sus conversaciones que no sabía nada, pero que era más sabio que los demás porque estaba consciente de su ignorancia mientras los otros creían saber. Quien cree saber no se esfuerza en buscar la verdad. El primer paso hacia la verdad es barrer de la mente los prejuicios, las ideas incompletas, los errores que generalmente llenan las cabezas de la gente y no dan lugar a la verdad. Hecha la limpieza, el camino queda abierto.


Apología de Sócrates

Apología de Sócrates  es una obra de Platón que da una versión del discurso que Sócrates pronunció como defensa, ante los tribunales atenienses, en el juicio en el que se le acusó de corromper a la juventud y no creer en los dioses de la polis. Aunque su datación exacta es incierta, el texto, por su temática, pertenece al ciclo platónico de las primeras obras llamadas «socráticas», que Platón escribió en su juventud, e incluso se piensa que es su primera obra.

Sócrates comienza diciendo que no sabe si los atenienses (asamblea general) han sido ya persuadidos por los que lo acusan. Este comienzo es crucial para establecer el tema de todo el discurso, pues es frecuente que Platón comience sus diálogos socráticos exponiendo la idea general del texto. En este caso, el diálogo se abre con "¡Ciudadanos atenienses!, Ignoro qué impresión habrán despertado en vosotros las palabras de mis acusadores". Este ignoro sugiere que la filosofía expuesta en la Apología va a consistir enteramente en una sincera admisión de ignorancia, pues todo su conocimiento procede de su no saber nada: "Sólo sé que no sé nada".

Sócrates pide al jurado que no le juzgue por sus habilidades oratorias, sino por la verdad que estas convocan. A su vez, asegura que no va a utilizar ornamentos retóricos ni frases cuidadosamente preparadas, sino que va a decir en voz alta lo que se le pase por la cabeza, las mismas palabras que utilizaría en el ágora y en las reuniones, pero a pesar de esto demuestra ser un maestro en retórica, y que no es solo elocuente y persuasivo, sino que sabe jugar con el jurado. El discurso, que ha puesto a los lectores de su lado durante más de dos milenios, no consigue ganarle el juicio. Sócrates fue condenado a muerte, y ha sido admirado por su calma aceptación de ello.

La Mayéutica






Sòcrates
Sócrates fue hijo de una comadrona, Faenarete, y de un escultor, Sofronisco, emparentado con Arístides el Justo. Pocas cosas se conocen con certeza de la biografía de Sócrates, aparte de que participó como soldado de infantería en las batallas de Samos (440), Potidea (432), Delio (424) y Anfípolis (422). Fue amigo de Aritias y de Alcibíades, al que salvó la vida.
La mayéutica
Al parecer, y durante buena parte de su vida, Sócrates se habría dedicado a deambular por las plazas y los mercados de Atenas, donde tomaba a las gentes del común (mercaderes, campesinos o artesanos) como interlocutores para sostener largas conversaciones, con frecuencia parecidas a largos interrogatorios. Este comportamiento correspondía, sin embargo, a la esencia de su sistema de enseñanza, la mayéutica.
El propio Sócrates comparaba tal método con el oficio de comadrona que ejerció su madre: se trataba de llevar a un interlocutor a alumbrar la verdad, a descubrirla por sí mismo como alojada ya en su alma, por medio de un diálogo en el que el filósofo proponía una serie de preguntas y oponía sus reparos a las respuestas recibidas, de modo que al final fuera posible reconocer si las opiniones iniciales de su interlocutor eran una apariencia engañosa o un verdadero conocimiento.






La influencia de Sócrates

Sócrates ejercerá una influencia directa en el pensamiento de Platón, pero también en otros filósofos que, en mayor o menor medida, habían sido discípulos suyos, y que continuarán su pensamiento en direcciones distintas, y aún contrapuestas. Algunos de ellos fundaron escuelas filosóficas conocidas como las "escuelas socráticas menores", como Euclides de Megara (fundador de la escuela de Megara), Fedón de Elis (escuela de Elis), el ateniense Antístenes (escuela cínica, a la que perteneció el conocido Diógenes de Sinope) y Aristipo de Cirene (escuela cirenaica).

                            

El legado de Sócrates

El legado de Sócrates.

Parte importante del legado que nos dejo el padre de la filosofía, es lo que hoy conocemos como "Diálogos socráticos". En sentido más estricto, el término se refiere a las obras en las cuales Sócrates es el personaje principal, aunque otros géneros son incluidos, como las Leyes de Platón y Hierón de Jenofonte que son diálogos socráticos en los cuales un hombre sabio que no es otro que Sócrates, dirige la discusión. Además el formato del estilo de los diálogos pueden variar: los diálogos de Platón contienen generalmente las palabras directas de cada hablante, mientras en los diálogos de Jenofonte estas están escritas en una historia continua que contiene junto a las narraciones de las circunstancias, los dichos de los hablantes.
De acuerdo a un fragmento de Aristóteles, el primer autor de los diálogos socráticos fue Alexemenes de Teos, pero no se sabe nada acerca de él y si Sócrates aparece en su obra o si es confiable la negativa apreciación de Aristóteles acerca de él. Adicionalmente, muchos otros escribieron diálogos socráticos como Platón y Jenofonte, Antístenes, Aesquines de Espetos, Faedo, Euclides de Megara, Teocritus, Tissafernes y Aristóteles. Posteriormente Cicerón escribió diálogos similares en latín acerca de filosofía y temas retóricos, por ejemplo en su De re publica. También Séneca escribiría diálogos.
El diálogo socrático como género filosófico-literario inventado por Platón es deudor del teatro antiguo (comedia y tragedia) adaptado a la filosofía, motivo de que se aprecien diálogos en la obra de comediógrafos como Aristófanes y Luciano de Samosata.
En épocas posteriores, Boecio, Berkeley, Galileo Galilei, Voltaire, Rousseau, Diderot y en España Juan Valdés y su hermano Alfonso Valdés, al igual que Fray Luis de León, compusieron diálogos socráticos o textos filosófico-literarios de inspiración platónica en la forma. 

domingo, 26 de febrero de 2017

La muerte de Sócrates a través del Arte

La muerte de Sócrates a través del arte 

Paloma Lizardo




La pintura suele contener simbolismo, que da a entender visualmente aunque no de manera completamente evidente la historia en una escena, así como los sentimientos y el contraste de la época en la que se realizó. Con los colores, las luces, las sombras, la composición, el lenguaje corporal, el autor Jacques-Louis David, de la obra nos expone la última lección de Sócrates a sus discípulos; la muerte no debe de ser temida por un filosofo.

Sócrates había sido acusado en 399 a. C. de despreciar a los dioses y corromper la moral de la juventud, alejándola de los principios de la democracia. Sus ideas, eran despreciadas por muchos atenienses, algunos de ellos bastante poderosos

La Mort de Socrate es realizada en el año 1787 dentro del estilo del Neoclasicismo está inspirada en el texto escrito por Platón "Fedón" o "Sobre el alma" justo antes de tomar el veneno:

"Él paseó, y cuando dijo que le pesaban las piernas, se tendió boca arriba, pues así se lo había aconsejado el individuo. Y al mismo tiempo el que le había dado el veneno lo examinaba cogiéndole de rato en rato los pies y las piernas, y luego, apretándole con fuerza el pie, le preguntó si lo sentía, y él dijo que no. Y después de esto hizo lo mismo con sus pantorrillas, y ascendiendo de este modo nos dijo que se iba quedando frío y rígido. Mientras lo tanteaba nos dijo que, cuando eso le llegara al corazón, entonces se extinguiría.
Ya estaba casi fría la zona del vientre, cuando descubriéndose, pues se había tapado, nos dijo, y fue lo último que habló:
—Critón, le debemos un gallo a Asclepio. Así que págaselo y no lo descuides.
—Así se hará, dijo Critón. Mira si quieres algo más.
Pero a esta pregunta ya no respondió, sino que al poco rato tuvo un estremecimiento, y el hombre lo descubrió, y él tenía rígida la mirada. Al verlo, Critón le cerró la boca y los ojos.
Este fue el fin, Equécrates, que tuvo nuestro amigo, el mejor hombre, podemos decir nosotros, de los que entonces conocimos, y, en modo muy destacado, el más inteligente y el más justo."
Fedón117e-118c
En este óleo se puede apreciar en seguida el personaje principal, Sócrates. Su postura erguida expresa fortaleza y decisión, sus manos juegan un papel importante para la interpretación. Su mano izquierda apunta hacía arriba y hace referencia a la inmortalidad del alma, mientras que con la derecha que es el punto de fuga de la pintura esta tomando la cicuta.

Las Escuelas Socráticas

En el 399, a la muerte de Sócrates sus discípulos se dispersaron y algunos de ellos fundaron escuelas filosóficas. Ninguna de ellas representa el genuino pensamiento de Sócrates sino que desarrollan con autonomía algunos de los temas cuyo tratamiento iniciara el maestro a lo que agragarían numersos elementos tomados de los sofistas e incluso de los filósofos presocráticos.

La enseñanza de Sócrates, sin formar una escuela en el sentido propio de la palabra, dio origen a escuelas múltiples y muy diferentes entre sí, en relación con la manera de apreciar la enseñanza del maestro, y en relación también con el carácter y circunstancias especiales de sus oyentes. Algunos de estos eran de avanzada edad, y vinieron a su escuela con opiniones y convicciones científicas formadas ya de antemano, como Cherefón, Antístenes y Gritón. Había otros, que, si acudían a las lecciones de Sócrates, era solamente con fines políticos, y con el deseo de aprender el arte de gobernar, o, mejor dicho, de dominar a los hombres, como Jenofonte, Cricias y Alcibíades. Así es que su maestro, el cual poseía a maravilla el arte de atraer los hombres, comunicándoles a la vez provechosa enseñanza, cuando se entretenía con estos, enderezaba sus discursos a sus fines e inclinaciones personales, discutiendo sobre el fin y constitución del Estado, sobre la democracia y la aristocracia, sobre las leyes y la constitución social.

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miércoles, 22 de febrero de 2017

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